Pues eso, no somos ñoñas, ni inestables ni quejicas, ni lloronas, simplemente, estamos embarazadas y esto en nuestra vida es nuevo y recibimos demasiada información y prácticamente toda ella es contradictoria entre si.
Por no contar si cometes el terrible error de meterte en foros de internet que hablen al respecto, dos semanas de sofá e insomnio me costó la broma.